La ciudad está paralizada por el miedo. Un asesino ha sembrado las calles de cadáveres que aparecen tatuados con un primitivo signo. Jefferson, un hábil y experimentado policía se ha propuesto acabar con el pánico. Difícilmente, sin embargo, logrará sospechar de quién se trata y sólo una súbita revelación le pondrá sobre la pista del asesino. De día su pasión es el dinero y su vida una sucesión de éxitos, de noche se transforma en un sangriento cazador implacable hasta conseguir su presa.